Aunque la psiquiatría existe como especialidad desde principios del siglo
XIX, no es sino hasta mediados del siglo XX que aparece el primer antipsicótico
y con ello se disparan los avances que hasta la fecha hacen de la psiquiatría
una rama moderna de la medicina. En este tiempo, los psiquiatras se formaban
egresando de la escuela de medicina y entrando en contacto diario con los
pacientes con trastornos mentales de un asilo. En la actualidad el psiquiatra
es un profesional que completó la carrera de medicina y que realizó una
especialización en esta rama. A diferencia del psicólogo, puede formular
medicamentos; y a diferencia del neurólogo, puede proporcionar psicoterapia.
Hoy en día se ha venido estigmatizando, de manera ignorante, como “loco”, a
aquel individuo que acude a esta consulta y por esto se siente temor al tener
que pedirle ayuda a un psiquiatra, y cuando lo hacen pretenden que esto se “al
escondido”. Otros, consideran ¿Para qué voy donde una persona que seguramente
está más “loca o loco” que yo a contarle mi vida? Esto último puede llegar
a causar bastante escepticismo a la hora de tomar la decisión de consultar,
pero la verdad es que existe la necesidad de conocer la historia personal de cada
paciente, así como las circunstancias sociales, familiares y laborales que lo
rodean y que pueden estar influyendo en su padecimiento.
¿Por qué el psiquiatra no sólo trata “locos”? porque el psiquiatra atiende a
las personas que sufren o padecen diversos trastornos. Aquí les dejo una pequeña
lista en las que se encuentran algunos:
·
Trastorno depresivo, ansiedad,
angustia, fobias, manía.
·
Psicosis, esquizofrenia.
·
Problemas de conducta,
de los afectos y de las emociones.
·
Fármaco-dependencia,
tabaquismo, alcoholismo, uso de sustancias Ilegales.
·
Psicoterapia, problemas
de pareja, problemas de familia.
·
Tanatología (ayuda
ante la muerte inminente).
·
Dimorfismos.
·
Trastornos de la
alimentación.
·
Demencias.
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